Ancestros chinos, llamados dignitarios

Como decía Heinz , "Los chinos siempre se han interesado por su pasado-el culto de los ancestros es el culto de los orígenes."

Venerar a los ancestros chinos o practicar el culto de los ancestros era un ritual basado en una multitud de creencias. Se creía muy fuerte que cuando un miembro de la familia moría el muerto aún seguía su vida en el mas allá con la capacidad de influenciar la suerte o mala suerte de la familia. Los cultos empezaron en China a partir del neolítico. Hacen ese culto para que los ancestros sigan teniendo la misma calidad de vida en el más allá. Con una buena calidad de vida los ancestros aseguran la protección de la familia. Yang explica que la función social o no creyente de este culto es de “cultivar los valores de la familia, como el parentesco y la lealtad para seguir dentro de la línea familiar”. Fue en el apogeo de la dinastía Qing que se empezaron a pintar los retratos de los ancestros. Los retratos son una muestra de estatus social.

Los retratos responden a códigos muy estrictos. Son una mezcla de diferentes enseñanzas del confucianismo, del taoísmo, del budismo y de las creencias populares. El ancestro esta derecho con la cabeza alta (viste un atuendo y un sombrero mandarín), solo la cara cambia de un retrato a otro. Sin embargo la expresión de la cara siempre es neutra. Para pintar estos cuadros se tienen que respetar dos exigencias: representar de manera más fiel al muerto y embellecerlo. Dentro de la cultura china el aspecto del noble le garantiza o no felicidad de sus descendientes. El atuendo, los bordados, el mobiliario y los demás detalles no representan la realidad. Son lujos ficticios para decorar el cuadro y garantizar la felicidad de la descendencia.